Con tus propios recursos puedes darle sentido a tu vida

Tus acciones reflejan tu conciencia - usa la hipnosis
Tus acciones reflejan tu conciencia

Tú puedes darle sentido a tu vida con  tus propios recursos! Cada uno de nosotros tiene el poder y el derecho de ser feliz consigo mismo y con su entorno. Pero cómo? En esto puede y te ayudará la hipnosis.

La hipnosis te conduce a un estado de trance en el que tú mismo y con tus propias herramientas (recursos) tales como emociones, intuición, poder de sanación e imaginación creativa (visualización) lograrás alcanzar tus objetivos. El resultado será mejorar la calidad de tu vida y deshacerte de los temores que te limitan. Todo esto sucede durante una sesión de hipnosis, en la que tú te encontrarás en un estado de relajación física y mental convenientes para tu persona. Ya después de la primera sesión sientes en tí la influencia positiva de la hipnosis.

Milton Erickson, el padre de la hipnosis moderna, decía:

Los recursos que tú necesitas los encuentras en tu propia historia.

Y para qué hipnosis?

Escasez de tiempo y monotonía. Soledad. Combátela con la hipnosis
Escasez de tiempo y monotonía. Soledad.

Hoy en día nuestras vidas se caracterizan por la escasez de tiempo y la monotonía en lo cotidiano. En nuestras vidas hay muchas situaciones que no somos capaces de solucionar por nosotros mismos. Y así llega el día en el que nos hacemos la pregunta: Por qué me sale todo mal? Por qué me suceden cosas que no deseo y que no las puedo cambiar? El temor se hace dueño de nuestra consciencia y así perdemos cada día más y más la confianza en nosotros mismos. Algunos efectos son neurosis, depresiones, aislamiento o enfermedades psicosomáticas como insomnio (pero también pesadillas o afirmamos no soñar), jaquecas, problemas estomacales (perdida del apetito, úlceras), poco o mucho peso etc. (ver oferta). Los problemas que tenemos, consciente o inconscientemente, son cada día más. Resumen: Somos infelices y carecemos plenamente de motivación. És esto calidad de vida?

Normalmente después de la segunda o tercera sesión te sentirás como una nueva persona, más feliz y positivo (y también lo serás!).

Al final lo que cuenta es lo que hacemos y vivimos, y no lo que sólo hemos ansiado.

Arthur Schnitzler